"Estoy empezando a desear a otros, ¿se está acabando con mi pareja?"
Desear, es una cualidad, es una característica innata en los seres humanos, por tanto no debemos temer al deseo, siempre y cuando sepamos gestionarlo para nuestro beneficio.
Sentimos deseo cuando algo se ajusta a nuestros gustos, valores, admiraciones, creencias e ideas, cuando algo nos sorprende o nos emociona, cuando algo es nuevo y misterioso.
Por lo tanto, durante nuestra vida vamos a desear a muchas personas, independientemente de cuantas parejas tengamos, así que no te asustes, sentir deseo por alguien que no es tu pareja es algo natural y sano; es más, no sentir deseo por otras persona durante una relación de larga duración es algo menos común que sentirlo, otra cosa es que no lo queramos aceptar o que este nos produzca emociones que nos hacen daño como la culpa o el miedo.
Foto: Hannes Caspar
A continuación, voy a describir algunas creencias erróneas en torno a lo que muchas veces conlleva sentir deseo hacia otra/s persona/s dentro de una pareja:
1. Si desea a otra/o es que no le das lo que necesita: ¡vaya tela!, en primer lugar, cada persona debe hacerse responsable de sus necesidades, no culpar al otro/a miembro/a, en este caso yo pensaría más bien en un problema de comunicación, que de incompetencia sexual. Las personas no somos adivinas y tenemos gustos diferentes y variados ¡Di lo que te gusta!
2. Si deseo a otro/a es que ya no siento amor por mi pareja: amor y deseo son dos conceptos diferentes, por eso son distintos, además, piensa en las personas que tienen mucho sexo esporádico, las cuales no se enamoran de todas las personas con las que han mantenido sexualidad. También resulta al contrario, muchas personas se quejan de no tener deseo hacia su pareja, a la cual expresan querer. Por tanto, este pensamiento es erróneo y no solo eso, sino que conlleva mucho sufrimiento para las personas.
3. "¿Te gusta ese (esa) verdad?": este tipo de preguntas probablemente nos resulten familiares, que queremos conseguir con ellas, generan hasta miedo contestarlas, porque toda respuesta que des parece no ser del agrado de tu pareja, si dices que no, mientes y si dices que si, se crea un conflicto mayor. En este caso el foco de atención creo que debemos ponerlo en la persona que pregunta, cual es el objetivo de la pregunta, que respuesta pretende escuchar y si está preparado o no para oír alguna respuesta que no quiere escuchar. Si este tipo de preguntas es un juego para ti, y no crea ningún conflicto entonces la cosa se puede quedar ahí, pero si te sientes mal al pensar, formular y escuchar la respuesta de la pregunta, es que probablemente tengas falta de confianza e inseguridades en ti mismo.
4. Si no se lo dices es que no hay confianza en la pareja: volvemos al tema anterior, ¿con qué objetivo doy esta información a mi pareja?, la mayoría de las veces es para hacer daño, dar celos, quitarme un sentimiento de culpabilidad porque creo que estoy engañando a mi pareja, etc. Muchas veces comunicamos cosas innecesarias, que no crean ningún beneficio para mi pareja, y que además generan daño y resentimiento en el otro/a, puesto que si nuestra pareja no está preparada para recibir este tipo de mensajes ¿para qué vamos a generarle malestar?, otra cosa es que estéis pensando en otra persona para un trío, entonces tu información tiene un sentido.
Pues bien, quería comentar algunos de los problemas que pueden surgir en torno al deseo sexual, ya es momento de aceptar el deseo como algo positivo, que mueve emociones y nos hace sentir vivos.
Recuerda que el problema no está en desear, sino en qué hago yo con ese deseo, como lo gestiono, si voy a emitir una conducta motivada por el o no, ya es una decisión personal de cada individuo que decidirá hacer frente o no a las consecuencias que ello le pueda traer.
Para finaliza, disfruta de tu deseo, no te sientas mal por sentirlo, a la gran mayoría nos pasa, y recuerda que si no puedes o no quieres disfrutarlo en la realidad, siempre tienes tu imaginación, la cual debe ser libre.
Escrito por: María Álvarez, AN08209.